Muriò a los 86 años el compositor alemán Hans Werner Henze.
El compositor alemán Hans Werner Henze, uno de los más importantes de su generación en su país, falleció el sábado a los 86 años de edad. Nacido el 1 de julio de 1926 en Gütersloh (oeste), Hans Werner Henze "uno de los más versátiles e influyentes compositores de nuestro tiempo" murió este sábado en Dresden (este), anunció la casa editora en su página web oficial.
El compositor alemán Hans Werner Henze, uno de los más importantes de su generación en su país, falleció el sábado a los 86 años de edad. Nacido el 1 de julio de 1926 en Gütersloh (oeste), Hans Werner Henze "uno de los más versátiles e influyentes compositores de nuestro tiempo" murió este sábado en Dresden (este), anunció la casa editora en su página web oficial.
Henze produjo para teatro, ópera y cine, incluidas numerosas bandas sonoras para películas del francés Alain Resnais y el alemán Volker Schlöndorff. Compuso más de 40 óperas, 10 sinfonías desde 1947 a 2000, concertos, entre los que destaca el ciclo de concertos sacros titulado Requiem (para trompeta, piano y orquesta de cámara), así como numerosas piezas de música de cámara y solistas.
"Su obra combina una belleza atemporal y el compromiso político contemporáneo", apuntó la editora. "Quería posicionarse en cuestiones políticas a través de la música", escribió Schott, citando entre los acontecimientos que marcaron al compositor la Alemania nazi, mayo de 1968 y la revolución en Cuba.
Henze era homosexual y vivía desde 1953 en Italia. Su compañero durante más de cinco décadas, Fauto Moroni, al que conoció en 1964, murió en 2007. Fue en el paisaje clásico de Italia donde "encontró su armonioso equilibrio entre el arte y la vida, embarcándose en sus proyectos prácticos, divirtiéndose con su compañero Fausto Moroni y después retirándose a su estudio y sus partituras", dijo el comunicado.
Henze, más conocido por sus sinfonías y su música para teatro, colaboró estrechamente durante varios años con la poetisa austriaca, Ingeborg Bachmann, autora de los libretos de sus óperas, "El Príncipe de Homburgo" (1958-1959), "El joven Lord" (1964), "Elegía para jóvenes amantes" (1959-1961) y "Las Bacantes" (1964-1965) que Schott describe como "un hito en su producción compositiva".
"Su obra combina una belleza atemporal y el compromiso político contemporáneo", apuntó la editora. "Quería posicionarse en cuestiones políticas a través de la música", escribió Schott, citando entre los acontecimientos que marcaron al compositor la Alemania nazi, mayo de 1968 y la revolución en Cuba.
Henze era homosexual y vivía desde 1953 en Italia. Su compañero durante más de cinco décadas, Fauto Moroni, al que conoció en 1964, murió en 2007. Fue en el paisaje clásico de Italia donde "encontró su armonioso equilibrio entre el arte y la vida, embarcándose en sus proyectos prácticos, divirtiéndose con su compañero Fausto Moroni y después retirándose a su estudio y sus partituras", dijo el comunicado.
Henze, más conocido por sus sinfonías y su música para teatro, colaboró estrechamente durante varios años con la poetisa austriaca, Ingeborg Bachmann, autora de los libretos de sus óperas, "El Príncipe de Homburgo" (1958-1959), "El joven Lord" (1964), "Elegía para jóvenes amantes" (1959-1961) y "Las Bacantes" (1964-1965) que Schott describe como "un hito en su producción compositiva".
Hans Werner Henze era el mayor de los seis hijos de un profesor de colegio conservador. Su temprano interés por el arte y la música, su homosexualidad y su inconformismo político fueron fuente de conflictos con su padre, miembro del Partido Nazi. Fue llamado al ejército en 1944, donde se formó como oficial de radio. Pero pronto fue capturado por los británicos y encerrado en un campo de prisioneros hasta el final del conflicto.
Las experiencias que Henze vivió durante esta época fueron las que provocaron en él un odio apasionado para toda su vida contra la guerra y el fascismo y también dejaron huella en su producción artística, especialmente en "Vamos al río" (1974-1976) y en su novena sinfonía, escrita entre 1995-1997 y basada en la novela de Anna Seghers "La séptima cruz". "Con el coraje inquebrantable de sus convicciones, pero también con su alegría de vivir, su amor por las cosas bellas y la naturaleza, el espíritu inquieto de Henze nos revela a un hombre que nunca perdió de vista sus aspiraciones artísticas, a pesar de sus muchos sufrimientos personales e históricos peligros", escribió Schott.
POR: AGENCIA EFE / AFP / TERRA.ES
ARREGLOS: ALBERTO CARRERA
Las experiencias que Henze vivió durante esta época fueron las que provocaron en él un odio apasionado para toda su vida contra la guerra y el fascismo y también dejaron huella en su producción artística, especialmente en "Vamos al río" (1974-1976) y en su novena sinfonía, escrita entre 1995-1997 y basada en la novela de Anna Seghers "La séptima cruz". "Con el coraje inquebrantable de sus convicciones, pero también con su alegría de vivir, su amor por las cosas bellas y la naturaleza, el espíritu inquieto de Henze nos revela a un hombre que nunca perdió de vista sus aspiraciones artísticas, a pesar de sus muchos sufrimientos personales e históricos peligros", escribió Schott.
POR: AGENCIA EFE / AFP / TERRA.ES
ARREGLOS: ALBERTO CARRERA
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